PLANETA VULNERABLE
TEATRO ECOLÓGICO DEL SIGLO XXI
¿Puede el teatro contribuir a organizar el pesimismo que la devastación de nuestro vulnerable planeta está sembrando en un número cada vez mayor de sus habitantes?
Ya nadie se atreve a negar que la humanidad ha generado un sistema económico, social, político y ético que amenaza –quizás ya irreversiblemente– la futura habitabilidad del planeta. No se trata de una catástrofe apocalíptica producida por incontrolables procesos naturales ni por oscuros designios sobrenaturales. Es la consecuencia de un modelo de sociedad basado en el progreso ilimitado, el crecimiento sin freno, el expansionismo global, el consumismo inducido, la idolatría de la productividad y el culto del beneficio económico a toda costa. Tal modelo tiene un nombre: capitalismo.
Ya nadie se atreve a negar que la humanidad ha generado un sistema económico, social, político y ético que amenaza –quizás ya irreversiblemente– la futura habitabilidad del planeta. No se trata de una catástrofe apocalíptica producida por incontrolables procesos naturales ni por oscuros designios sobrenaturales. Es la consecuencia de un modelo de sociedad basado en el progreso ilimitado, el crecimiento sin freno, el expansionismo global, el consumismo inducido, la idolatría de la productividad y el culto del beneficio económico a toda costa. Tal modelo tiene un nombre: capitalismo.
Martes, 26 de junio de 2018. Hoy han venido a Agua de Mayo Eva Redondo y Ricardo Reguera a representar una lectura dramatizada, como parte de un proyecto de teatro fronterizo.
La obra, con texto de Eva e interpretada por ambos se centra en una parte de la ecología muy mediática en estos últimos años, la contaminación de los océanos por los plásticos.
En mi opinión la obra es algo que no se puede resumir o explicar como una obra de teatro al uso, es algo que se tiene que ver. Simplemente una explosión de sensaciones y de ideas y pensamientos sobre el trágico rumbo que lleva la humanidad, temas tan trágicos como la indiferencia de un humano al sobrevolar un océano de basura porque su compañero de vuelo es gay; tragedias como la ambición del ser humano y su obsesión con siempre querer más aunque eso nos dañe a nosotros mismos y a los que están a nuestro alrededor; y la peor tragedia de todas, la cruda realidad que puede ser que la humanidad sea la mayor enfermedad de todas, la que más mate y la que más daño al planeta hace.
La obra, con un trasfondo en el que el protagonista es Bob Esponja, concluye con un discurso del propio creador del dibujo animado, un discurso que da paso a la esperanza de que la humanidad aún se puede curar y que deja atrás todo el caos que hemos ido creando a nuestro paso.
Una obra que recomiendo a todos ver y disfrutar.